SIN TÍTULO, COMO EL FUTURO.
Ya no hay nada. El tiempo parece escasear por estos días y nadie llega a la hora indicada a su trabajo. Ya casí no existe trabajo, por la sin razón que representa el futuro. Muchos dicen, el tiempo se agota, entre murmullos de bajo volumen, como si todos quisieran esconder la desesperanza de un fin que se conoce desde hace mucho.
El habitante número 255689765 se levanta de su cuarto asfixiado por algunos rayos de sol que ingresaron a un orificio que se escapó a su vista, en alguna de sus inspecciones diarias. Todos los días se hacen orificios. El sol derrite más las cosas.
El habitante número 255689765 se levanta de su cuarto asfixiado por algunos rayos de sol que ingresaron a un orificio que se escapó a su vista, en alguna de sus inspecciones diarias. Todos los días se hacen orificios. El sol derrite más las cosas.